Huir: " Alejarse precipitadamente de un lugar o de una persona por temor o para evitar un daño o un peligro"
De repente tienes un mundo aparentemente perfecto, los que te rodean ven que todo en tu vida es ideal aunque en el fondo tú no estés plena, todos envidian tus "comodidades" pero tú quieres avanzar y tener más, los demás sienten y hablan de que tienes el trabajo perfecto en una compañía de ensueños, tus compañeros añoran estar allí y pareciera que valoran desde el exterior. Las opiniones e ideales de los demás hacen que te aferres, pueden tener razón, quizá lo que te rodea es muy bueno y aparentemente perfecto pero si en tu interior grita tu alma, si hay cambios que quieres hacer, si ya no eres tan feliz; entonces debes saltar, tápate los oídos y no escuches los demás, agradece a Dios las oportunidades pero SALTA. ¡HUYE!.
No te aferres por culpa del miedo. ¿Sabes? El miedo a lo desconocido siempre estará, el miedo a soltar eso tan bueno por una incertidumbre de lo que pueda pasar, pese a que los demás digan que estás loca, tú debes ver y saber que todo es una suma aunque eso no lo piense el resto. Una cosa es lo que eres, otra lo que muestras, y antes de tener a la gente contenta, incluso antes de tu estar contento, debes estar contigo. Debes amarte y vivir cada instante contigo misma.
Para, STOP... Para de exigirte tanto, para de ponerte metas sobre metas, estás cansada, necesitas respirar. Necesitas nuevos aires.
No te culpes, no te sientas mal por tus errores, debes aprender a aceptar todo aquello que no consigues, para de culparte, para de mentirte pensando que todo estará bien.
Quizá sea hora de reconocer que no estás confundida sino fundida con lo peor de tí, con los errores, estás encadenada.
Te mudaste a la inconformidad, a la falta de paz, te mudaste a la angustia y a las preocupaciones, a un trabajo con exceso de presión que ya no te hace tan feliz y has querido ser feliz allí. ¡HUYE!
